Lo que pudo ser y lo que acabó siendo
“Creyó sentir dolor, cuando una
guillotina la seccionó en dos mitades exactamente iguales. Poco después, estaba
deseando que el dolor fuese lo que acababa de sentir. La afilada cuchilla le
había atravesado con un golpe seco; pero no era nada comparado con el acometido
que habían reservado para ella. Siempre pensó que en su superficie se firmaría
el enlace civil de una joven e ilusionada pareja. Quiso ser, durante demasiado
tiempo, partícipe de la felicidad de unos novios que ya no conocería.
Sin embargo, había llegado su gran
día. El momento en el que la tinta penetraría entre sus fibras y quedaría
fijada en ella para siempre. Nada de lo que había imaginado iba a cumplirse. Ya
sabía que no serviría para dejar constancia de una boda civil por escrito. El
destino le tenía reservado un trabajo tan tétrico que le resultó hasta cómico,
aunque seguramente era irónico, la palabra que buscaba.
Relegada a una simple mitad, su parte
trasera iba a ser reutilizada y cuando la primera letra fue escrita sobre ella
supo lo que realmente era el dolor. La culpa no podía achacarse al secretario,
que la estaba manipulando, ya que lo hacía con una precisión envidiable. Su
tormento, provenía de lo que estaba grabando sobre su piel.
Acabó aturdida y dolorida, sin saber
muy bien que era lo que había pasado. Cuando se recompuso, pudo interpretar
aquello que tanto le había dolido. Aún desorientada alcanzó a leer:
“Certifico que Camilo Bravo Lascorz, de 29 años, ha
sido fusilado en esta ciudad el 30 de marzo de 1943 en cumplimiento con su
sentencia.”
Sobre su delicada
superficie se narraba el dolor de la muerte de un anarquista de veintinueve
años, que había sido represaliado por el nuevo régimen. Un dolor que había
sentido como suyo, como si a ella también le hubiesen atravesado las balas.
Sintió una profunda tristeza, que se incrementó cuando comprendió que esa era
su nueva cara. Las letras que todavía rezaban EXPEDIENTE de celebración de matrimonio civil quedaban ya atrás, en
su espalda. Ahondado más en su depresión, también comprendió que ella misma era
el recuerdo de un pasado mejor. La dura imagen de lo que pudo ser y de lo que
acabó siendo.”
Camilo Bravo Lascorz nació en Salas
Altas (Huesca) el cinco de febrero de 1915. En cuanto tuvo edad para trabajar
se desempeñó como jornalero, además de afiliarse a la CNT. Con el estallido de
la guerra, formó parte del Comité Revolucionario que pasó a gobernar el pueblo y se alistó voluntariamente en las milicias republicanas. Cuando Salas
Altas pasó a manos franquistas, su padre, Camilo Bravo Blanco, fue ajusticiado
sin que conste fecha ni lugar de los actos. Seguidamente, tras
el final de la guerra, fue detenido cuando tenía intención de huir del país,
motivado por la represión que presumiblemente recaería sobre él. Esta comenzó a
partir de su detención y continuó en el juicio sumarísimo que le condenó a
muerte el 27 de junio de 1942. En él, fue acusado de ser partícipe de más de
diez asesinatos en la retaguardia republicana. Todos ellos, fueron negados por
el acusado, llegando a aportar testimonios que hablaban en favor de su
inocencia. En cualquier caso, fue fusilado en Barbastro (Huesca) el 30 de marzo
de 1943 junto con el también anarquista y oriundo de su pueblo, Marcos Bosque
Guallar de 39 años.
En el expediente del
sumarísimo al que me he referido, aparece un documento donde se certifica el
fusilamiento de Camilo Bravo Lascorz. Para ello, son reutilizadas las hojas de
lo que debía ser un expediente de matrimonio civil. Estos fueron instaurados
por la Segunda República, dando pasó a una modernización laicista del Estado.
De esta forma, por los distintos ayuntamientos de la geografía nacional se
repartieron expedientes matrimoniales en blanco para ser rellenados cuando
llegase la ocasión. Con la llegada del régimen franquista, el país dio un paso
atrás en este aspecto y los matrimonios civiles quedaron abolidos (salvo
excepciones). Así que, en el Ayuntamiento de Barbastro un funcionario decidió
reutilizarlo, dejando para la posteridad esta mezcla tan impactante en un mismo
documento.
Fuente: Sumarísimo por adhesión a la rebelión y auxilio a la rebelión contra Altemir Lanau, Vicente; Bosque Guallar, Marcos; Bravo Lascorz, Camilo; Cantuer Feliu, Visitacion; Feliu Rodrigo, Isabel; Rubiella Arnal, Pedro; Berges Lajen, Francisco. Consejo de Guerra. Número de procedimiento: 3770-40. Folio 197.
Nota: los documentos se
encuentran cosidos entre sí por lo que parte de estos queda oculta; además de
hacer inviable su escaneado.
Comentarios
Publicar un comentario